A raíz de las consultas de numerosos ciudadanos, el Instituto para el Desarrollo Sustentable recuerda que es posible disponer de manera especial las cápsulas de café, para colaborar con las Cooperativas de Recicladores Urbanos que trabajan en el Complejo Ambiental de la ciudad. Las cápsulas usadas deben separarse del resto de los residuos recuperables, colocarse en contenedores exclusivos y sacarse los lunes y jueves con la recolección domiciliaria.
El hecho de utilizar cápsulas ha generado un residuo nuevo que con la cafetera tradicional, no existía. Por eso, frente al incremento del consumo de café en cápsulas, es importante incorporar buenas prácticas ambientales, que nos permitan disponer correctamente este residuo.
Desde el Instituto para el Desarrollo Sustentable se recuerda que es posible disponer de manera especial las cápsulas de café, para optimizar el trabajo en la planta de recupero y colaborar con las Cooperativas de Recicladores Urbanos que gracias a la correcta separación pueden reciclar y comercializar este tipo de material.
Las cápsulas de plástico o de aluminio usadas pueden separarse, y colocarse en contenedores exclusivos como ser frascos, bolsas, cajas.
Una vez que el contenedor está completo, deben sacarse con la recolección domiciliaria de residuos recuperables los días lunes y jueves de 20 a 21 horas.
Si el contenedor de cápsulas es muy pequeño, puede sumarse dentro de la misma bolsa de residuos recuperables.
Qué hacer con los restos de café
Otras de las consultas recibidas por parte de los ciudadanos, es sobre el uso que se le puede dar a los restos de café, ya que muchas de las cafeteras actuales generan este otro tipo de residuo.
Entre algunas de las funciones más conocidas, los restos de café puede utilizarse para hacer compostaje en los hogares, junto con otros residuos orgánicos.
También sirve para eliminar los malos olores: se debe poner en pequeños recipientes abiertos y colocarlo cerca de cestos de basura o algún rincón del baño o el lavadero.
Además es muy utilizado para ahuyentar animales de las plantas o de la huerta, incluso hormigas.
Cuenta con los nutrientes básicos que todas las plantas necesitan para crecer y también permite potenciar la vida bacteriana del suelo. Pero como todo compuesto, es importante medir las proporciones, para mantener equilibrada la acidez del suelo.